viernes, 31 de agosto de 2018

Buscando a Sugar Man. Sixto Rodriguez



En 1970 se publicó Cold Fact, el primer álbum de Sixto Rodriguez, un  músico de Detroit que muy pronto cayó en el olvido.
Cuarenta años después, en el documental Searching for the Sugar Man, fue recuperada su obra del anonimato en el que había sido sepultada. Cuando se estrenó en Madrid fui a ver este documental y me fascinó. También escribí algo aquí, en Robles. 
https://roblesamarillos.blogspot.com/2013/04/blog-post.html

                      



En Cold Fact hay canciones memorables pero una es, para mí, un portento, Crucify Your Mind.



Crucify Your Mind       
 Was it a huntsman or a player
That made you pay the cost
That now assumes relaxed positions
And prostitutes your loss?

Were you tortured by your own thirst
In those pleasures that you seek
That made you Tom the curious
That makes you James the weak?

And you claim you got something going
Something you call unique
But I've seen your self-pity showing
As the tears rolled down your cheeks.

Soon you know I'll leave you
And I'll never look behind
'Cos I was born for the purpose.

That crucifies your mind
So con, convince your mirror
As you've always done before
Giving substance to shadows
Giving substance ever more.

And you assume you got something to offer
Secrets shiny and new
But how much of you is repetition
That you didn't whisper to him too.

Crucifica tu mente
¿Fue un cazador o un especulador
el que te hizo pagar el precio
y ahora adopta posiciones relajadas
y prostituye tu derrota?

¿Te torturaba tu propia sed
de placeres que buscabas,
que te convirtieron en Tom el curioso,
que te hacen ser James el débil?

Y aseguras que tienes algo en marcha
algo que dices que es único
pero yo he visto aparecer tu autocompasión
mientras las lágrimas corrían por tus mejillas.

Sabes que pronto te dejaré
y que nunca miraré atrás
porque yo nací con el objetivo
de crucificar tu mente,
así que estáfalo, convence a tu espejo
como has hecho siempre antes
dándole cuerpo a las sombras
dándoles cuerpo para siempre.

Y aseguras que tienes algo que ofrecer,
secretos brillantes y nuevos
pero cuánto de ti es repetición
si ni siquiera se lo susurras a él también.

                      Versión acústica

                Versión con orquesta









sábado, 18 de agosto de 2018

La aurora de Nueva York. Recuerdo de Lorca 82 años después




La aurora de Nueva York tiene
cuatro columnas de cieno
y un huracán de negras palomas
que chapotean las aguas podridas.

La aurora de Nueva York gime
por las inmensas escaleras
buscando entre las aristas
nardos de angustia dibujada.

La aurora llega y nadie la recibe en su boca
porque allí no hay mañana ni esperanza posible:
a veces las monedas en enjambres furiosos
taladran y devoran abandonados niños.

Los primeros que salen comprenden con sus huesos
que no habrá paraísos ni amores deshojados;
saben que van al cieno de números y leyes,
a los juegos sin arte, a sudores sin fruto.

La luz es sepultada por cadenas y ruidos
en impúdico reto de ciencia sin raíces.
por los barrios hay gentes que vacilan insomnes
como recién salidas de un naufragio de sangre.