En 1984 llegaron al Colegio Público Antonio Machado de Madrid, donde
yo daba clase de Lengua y Literatura, los primeros magnetoscopios y una cámara
de vídeo. En seguida nos pusimos manos a la obra y varios profesores hicimos pequeños guiones de
contenido didáctico, que muy pronto convertimos en vídeos.
Pasado algún tiempo decidí preparar
un audiovisual sobre el libro de teatro que leía todos los años con mis alumnos: Historia
de una Escalera, de Antonio Buero Vallejo. Busqué, y encontré, copias de las fotos del estreno de la obra en el Centro de Documentación Teatral, estreno que tuvo lugar en 1949 en el teatro
Español de Madrid. Rebusqué datos en la Hemeroteca Nacional y, con todos los
materiales seleccionados, preparamos el guion.
Presenté mi proyecto al autor,
Antonio Buero Vallejo, quien me recibió en su casa en persona. Me contestó por carta un par de semanas más tarde, sugiriéndome algunas precisiones que matizaban el guion. Bastantes meses después, le envié a don Antonio una
copia del vídeo que hicimos basado en el audiovisual y, muy amablemente, me contestó con otra carta, a vuelta de correo. Guardo con primor las
dos cartas, como señal inequívoca de la amabilidad, de la solidez y de la sencillez
de Buero Vallejo. Y las publico hoy aquí.
Me gustó buscar la música, y creo
que acertamos con ella: algunos pasajes de la película Novecento y
un par de canciones de la época en la que se estrenó la obra de Buero, "La
bien pagá" , cantada por Miguel de Molina, y "Luna de miel" en la versión que canta Gloria Lasso.
Editado el vídeo, lo presentamos en el concurso de Medios Audiovisuales Didácticos del Ministerio de Educación. Y en el invierno de 1989 nos comunicaron que habíamos ganado un accésit del tercer premio. Nuestra alegría fue dulce y compartida con las alumnas y alumnos participantes.
En 2010 hicimos una copia en
DVD de aquella cinta de vídeo VHS. De allí la pasamos al ordenador, y
de este a Youtube. La calidad del vídeo es acorde con los medios con los que
contábamos en aquel momento, hace ya cuarenta años. Pero aún hoy merece la pena
verlo, pues muestra una forma de trabajar con los alumnos muy interesante, ya
que su participación en la elaboración del guion, en la lectura de los textos, en la grabación y en el montaje supuso un aprendizaje activo y moderno.
En el año 2003, cuando yo daba clases en el Instituto de Educación Secundaria Emperatriz María de Austria de Madrid, se repuso Historia de una escalera en el teatro María Guerrero de la capital. Aproveché la ocasión y allí que fuimos alumnos y profesores a ver la obra de Buero. Y en el Instituto preparamos una exposición con las fotos de 1949 y las de 2003, con el guión y los materiales de aquel audiovisual de los años ochenta y con toda la documentación de 2003.
Ahora, en 2025 se vuelve a representar en el teatro Español de Madrid, en el mismo escenario en el que se estrenó en 1949, es decir, hace 75 años. Llevo ya casi una década jubilado, así que iremos a ver esta nueva representación, pero ya sin alumnos. Recordaré con alegría, y sin asomo de nostalgia, aquellos años ochenta, en los que resultó ser verdad que el mundo parecía ser más justo, pues a la educación pública se la trataba con dignidad, es decir, con presupuestos notables y con un profesorado motivado y bastante bien remunerado. En aquellos años fue posible hacer cosas como un audiovisual y un vídeo con alumnos en un colegio público de Carabanchel Alto con los medios que nos llegaron al centro. Eso sí, con con el apoyo de la comunidad educativa; y con el entusiasmo de estar haciendo realidad una educación activa y pública. Y contando también con el apoyo real y comprometido del autor de la obra, don Antonio Buero Vallejo.
Hoy sería más difícil hacer algo similar, debido a la política educativa que viene desarrollando el Gobierno de la Comunidad de Madrid, institución que, desde hace más de veinte años, viene maltratando a los colegios e institutos públicos con unos presupuestos rácanos y con un descuido, cuando no maltrato, de maestros y profesores, dadas sus condiciones de trabajo y la perfidia de muchos de los contratos.
Pero estoy seguro de que, en algun colegio público de algún barrio de Madrid, alguna maestra, algún maestro, verá la obra de Buero en el Español con sus alumnos y, sacando fuerzas de su profesionalidad y de su vocación, harán algún trabajo donde usen la tecnología actual para reivindicar la literatura. Para reivindicar a Antonio Buero. Para recordar que aquellos tiempos de silencio de 1949 no debieran regresar jamás, ni siquera en versión tecnofeudal. Y de paso, para reivindicar el gusto por el trabajo bien hecho. Y la experiencia de aprender con dignidad. Haciendo memoria de lo que fuimos. Y de lo que somos.
Jesús Bermejo
Algunas fotos del estreno de 1949 (Fotógrafo: Gyènes)

Emocional e interesante acercamiento a «Historia de una escalera» y a Buero Vallejo. Un tesoro esa carta del autor.
ResponderEliminarQué bonita y emotiva narración
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